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La tabla periódica, realizada con 118 cubos de hormigón, de medio metro de lado, y con un peso total de más de 350 toneladas, es una de las más grandes que se conocen

La gran tabla periódica viaja de Baluarte al Planetario de Pamplona

Llegó para convertir la Plaza de Baluarte en espacio de divulgación científica durante alrededor de treinta días y ha permanecido 15 meses.

La tabla periódica, realizada con 118 cubos de hormigón, de medio metro de lado, y con un peso total de más de 350 toneladas, es una de las más grandes que se conocen

La tabla periódica, realizada con 118 cubos de hormigón, de medio metro de lado, y con un peso total de más de 350 toneladas, es una de las más grandes que se conocen.

Llegó para convertir la Plaza de Baluarte en espacio de divulgación científica durante alrededor de treinta días y ha permanecido 15 meses. Ha formado parte del paisaje exterior de Baluarte desde finales de mayo del pasado año y hoy toca despedirse de la exposición que representa una tabla periódica de grandes dimensiones, con un cubo de hormigón por cada uno de los 118 elementos químicos. Fue la primera actuación del Convenio de la Ruta de la Ciencia firmado en marzo de 2019 por Gobierno de Navarra, Ayuntamiento de Pamplona, Universidad Pública, NICDO y Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. 

 

La exposición se traslada a la explanada del Planetario de Pamplona, donde se instalará de manera permanente para formar parte de las actividades «periódicas» del centro. Un nuevo escenario acorde con las circunstancias actuales y que permitirá al Pamplonetario realizar actividades en el exterior junto con el Jardín de la Galaxia y la observación de las estrellas. Por medio de paseos científicos y talleres se podrán conocer algunas de las historias curiosas de cómo se ha ido entendiendo la tabla, qué son los elementos, de dónde vienen y cómo se descubren, así como realidades desconocidas de algunos de los elementos más comunes. 

 

La tabla periódica, realizada con 118 cubos de hormigón, de medio metro de lado, y con un peso total de más de 350 toneladas, es una de las más grandes que se conocen y conmemora los 150 años de la publicación de los trabajos del químico ruso Dmitri Mendeléyev, aniversario que . Cada cubo de hormigón muestra información del símbolo de cada elemento, su número atómico, su distribución electrónica, y alguna de sus aplicaciones en cuatro idiomas, euskera, castellano, inglés y francés. Además, cada elemento dispone de un código QR que permite ampliar la información sobre el elemento y sus propiedades. 

 

El Convenio de la Ruta de la Ciencia tiene como finalidad extender el conocimiento científico a toda la población, así como potenciar un entorno favorable a la ciencia y la investigación. Además, se pretende mejorar la percepción por parte de la sociedad del valor de la ciencia, la investigación y la innovación como motores del desarrollo económico y social, así como de la protección medioambiental.

 

Noticia original de www.baluarte.com